La correa de distribución es un elemento del motor, el cual sincroniza la rotación del cigüeñal con el árbol de levas. En caso de que necesites un motor mini de segunda mano, te recomiendo que visites Motores DYG, porque allí encontrarás siempre los motores de mejor calidad y a los precios más ajustados.
Sin embargo, muchos conductores no saben mucho sobre la correa de distribución y todo lo relacionado con la misma. Por este motivo, hoy te invito a que sigas leyendo atentamente este post para que puedas conocerla de una forma mucho más efectiva.
¿Para qué sirve la correa de distribución?
La función básica de la correa de distribución es la de sincronizar los cuatro tiempos del motor, y puede accionar otros elementos como los inyectores o la bomba de agua. En su concepción es básicamente una tira de caucho, que se encuentra reforzada con fibras de alta resistencia que alargan su durabilidad.
Dependiendo del tipo de motor, esta correa puede ser de diferente longitud, tener una diferente ubicación y la composición también puede variar. La parte interior de la misma está dentada, para permitir la transmisión de la energía mecánica entre un piñón de arrastre y otro. A diferencia de las cadenas de distribución, las correas son ligeras, baratas y funcionan de una forma más suave.
¿Cuándo se debe cambiar la correa de distribución?
Este es un elemento propenso al desgaste, y las indicaciones para su cambio normalmente vienen en el libro de mantenimiento del vehículo. Sin embargo, ten en cuenta que, si la correa de distribución llega a romperse, tanto las válvulas como el pistón podrían llegar a verse gravemente afectados.
No hay un período fijado para el cambio de la correa de distribución, porque dependerá en gran medida del tipo de motor y las características del coche. La vida útil de esta pieza suele oscilar entre los 60.000 y los 160.000 kilómetros.
Sin embargo, no es recomendable llegar a estas cifras máximas para cambiarla, y se aconseja que se haga un cambio de la misma cada 5 a 6 años para que se mantenga en buen estado. Sin embargo, si el recorrido es intenso se recomienda acortar en un 20% el kilometraje para el cambio.
También debes tener en cuenta que las temperaturas extremas, pueden llegar a causar daños sobre la correa, por lo que es aconsejable la sustitución de la misma cada cuatro años.
